Sexto Circuito escucha argumentos en caso de Título X; el acceso al control de natalidad pagable y cuidado de la salud reproductiva están en riesgo
For Immediate Release: Oct. 27, 2022
WASHINGTON — Hoy, la Corte de Apelaciones del Sexto Circuito de EE. UU. escuchó argumentos orales en un caso que podría restablecer la ley mordaza del Título X de la administración anterior. Los argumentos orales son un claro recordatorio de lo que está en juego para la atención de la salud sexual y reproductiva en un mundo en el que no existe el derecho constitucional al aborto. Las restricciones en el acceso a la atención de la salud sexual y reproductiva han hecho daño de manera desproporcionada a las comunidades negras, latinas e indígenas, que ya enfrentan barreras para acceder a la atención médica debido al racismo y la discriminación sistémicos.
Si la corte decide restablecer la ley mordaza, podría poner en peligro el acceso —que tienen las personas con bajos ingresos— a la atención de la salud reproductiva pagable como lo son: el control de la natalidad y las pruebas de detección de cáncer, que pueden salvar vidas. También negaría el que las personas tengan acceso a información sobre dónde pueden abortar —aún cuando la soliciten directamente— lo que obligaría a los proveedores a ocultar información a sus pacientes.
Declaración de Alexis McGill Johnson, presidenta de Planned Parenthood Action Fund:
“A pesar de la devastación que estamos viendo en todo el país como resultado de que la Corte Suprema eliminó el derecho al aborto, algunos políticos todavía están trabajando activamente para negarle a las personas el acceso a la atención básica de la salud sexual y reproductiva. No se equivoquen: ellos están trabajando activamente para dañar la salud y el bienestar de nuestras comunidades. Esta demanda podría restablecer la ley mordaza, y no debemos dudar de la ambición de algunos políticos de despojar a las personas de la libertad de controlar sus propias vidas, cuerpos y futuros”.
Declaración de Iris Harvey, presidenta y directora ejecutiva de Planned Parenthood Advocates of Ohio:
“Parece que no hay límites para los ataques a la atención de la salud reproductiva, y para que los proveedores como nosotros no podamos atender a nuestros pacientes. La atención médica nunca debe reducirse a cuánto ganas, dónde vives o quién eres. Para demasiadas personas con bajos ingresos, incluyendo a aquellas que viven en áreas rurales y a comunidades de personas que no son blancas; el restablecimiento de esta ley mordaza podría representar la privación de la atención médica. Mientras esperamos la decisión de la corte, continuaremos haciendo todo lo que esté a nuestro alcance para garantizar que nuestros pacientes no pierdan su atención médica. Nuestros pacientes acuden a nosotros porque esperan la mejor información y atención médica disponible. Y nosotros continuaremos con nuestro compromiso de dárselos”.
El Título X es el único programa federal del país dedicado a brindar control de la natalidad pagable, y otros cuidados de salud sexual y reproductiva, a personas con bajos ingresos. Este programa financia servicios esenciales de atención médica, como asesoramiento y métodos anticonceptivos, pruebas y tratamientos de ITS, exámenes de detección de cáncer de mama y de cuello uterino, atención médica antes del embarazo y más.
El Título X es un programa de más de 50 años, creado con apoyo bipartidista. En 2019, la administración presidencial anterior implementó una ley mordaza nacional para prohibir a los proveedores del Título X a referir pacientes para el aborto. Las disposiciones peligrosas y médicamente innecesarias de la ley mordaza obligaron a muchos proveedores a abandonar el programa. Como resultado, la capacidad de pacientes de la red del Título X se redujo a la mitad, creando aún más barreras para la atención médica pagable para las personas con bajos ingresos. Cuando la ley mordaza estuvo vigente, seis estados no tenían proveedores del Título X y los centros de salud de Planned Parenthood abandonaron el programa en todo el país. Antes de 2019, cada año, los centros de salud de Planned Parenthood atendían a alrededor del 40% de los 3.5 millones de pacientes que dependían del programa Título X.
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